sábado, 30 de junio de 2012

Culturas empresariales que fomentan la corrupción

    

    





    Es algo ya sabido:  una cultura de podredumbre y corrupción ha crecido en el mundo empresarial y bancario,  ante la pasividad general, y sobre todo ante la pasividad (¿o connivencia?) de quienes debían vigilar. ¿Quién no conoce casos rampantes? Algunos bien concretos y menores los recogí aquí.

    El profesor Antonio Argandoña entra, quizá demasiado suavemente, en el problema. Sí, hace falta quitar del medio a una generación de dirigentes viciados. Con excepciones, porque siempre hay alguna. Pero pocas. 

    Necesitamos empresarios y banqueros y políticos... honrados, que no mientan, que basen su trabajo en el respeto a la confianza que se deposita en ellos. No tramposos. Todavía dominan los entresijos, y hay que retirarlos. 

    Es lo que propone taxativamente Argandoña en este artículo: Lecciones de (falta de) ética bancaria.

 


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