Mostrando entradas con la etiqueta aquilino polaino. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta aquilino polaino. Mostrar todas las entradas

sábado, 18 de enero de 2014

Una vida robada a la muerte: lo que se siente al pasar al otro lado

Una vida robada a la muerte 

Aquilino Polaino-Lorente 

Ed. Planeta




El doctor Aquilino Polaino, prestigioso siquiatra, nos relata en este libro su experiencia sicológica y vital tras sufrir un accidente que le llevó al borde de la muerte. Finalmente se recuperó tras varios días en coma y una lenta y penosa convalecencia.  


La traumática experiencia provocó una honda transformación en las relaciones personales del doctor Polaino. De pronto descubre, con inusitada claridad, que lo importante ya no es ser querido, sino querer libre y voluntariamente a los demás, y aprender a percibir el cariño que los demás nos prodigan.



Sin teorías, de manera vital, surge el descubrimiento de que debemos vivir “descentrándonos”, pensando más en los demás que en nosotros. Porque nuestra vida no tiene su centro en nosotros, sino parcialmente fuera, ya que es construida no sólo por nuestra acción, sino por el conjunto de acciones de los que nos rodean respecto a nosotros. Por eso, el verdadero “centramiento” es estar descentrados, fuera de nosotros: pensando en los demás y ayudándoles. 


Un descubrimiento vital acerca de nuestra realidad más profunda como personas. Debería decirnos mucho a todos en esta época de individualismo exacerbado. Es una invitación al cambio de perspectiva, para hacer el mundo más humano. 


Como escribe en el prólogo José Luis Pinillos, el libro es “un documento psicológico de valor excepcional que contribuye a desvelar los secretos mecanismos de una conciencia in statu nascendi. Se trata, por supuesto, de un relato privilegiado donde un hombre que vuelve del reino de las sombras narra el drama de su reincorporación a este mundo. Excepto que el libro es más que eso. Lo importante es que esa reincorporación se produce en un clima de relaciones interpersonales donde se hacen visibles espacios recónditos que el ajetreo de la vida cotidiana impide contemplar. El resultado del proceso es una rinàscita en el más elevado sentido de la palabra”.


Hay una enorme lógica coincidente entre estos testimonios “reales como la vida misma” y la enseñanza cristiana. Hace no muchos años oí predicar a don Álvaro del Portillo, con frase gráfica, que no podíamos “girar en la órbita del yo”, sino en la órbita de Cristo, y por Él  en la de los demás.


Más recientemente nos ha recordado  el Papa Francisco la misma idea,  animándonos a  “poner a Cristo y a los demás en el centro” de nuestras vidas.  


El libro tiene el valor añadido de que el autor, experto siquiatra, habla con precisión científica y técnica de los sucesos que experimentó en primera persona.