miércoles, 20 de julio de 2022

Abril encantado




Abril encantado. (The Enchanted April) Elisabeth von Arnim

 

Deliciosa comedia de enredo, protagonizada por cuatro mujeres inglesas. No se conocen, son muy distintas entre sí, pero les une el deseo de alejarse por un tiempo de la monotonía de sus vidas en su oscuro y gélido país, para gozar de unas vacaciones en la luminosa primavera de un pueblecito de la costa italiana. Solas, y lejos de sus maridos y familias.


El suave clima, la generosa fragancia de las flores en su apogeo primaveral, la luminosidad mediterránea… casi inadvertidamente comienzan a obrar su milagro en estas mujeres que han llegado estresadas y psicológicamente abatidas por problemas y faltas de entendimiento con sus parejas, y que se miran con recela entre ellas.


Pero el calor y la luz del Mediterráneo son capaces de transformar a quien se deja penetrar por la belleza del paisaje: entonces los problemas aparecen en su justa dimensión, poco a poco se disipan las tinieblas interiores, y va cambiando también la misma mirada hacia los demás: suspicaz y llena de prejuicios al principio, se va convirtiendo en una mirada comprensiva, tierna, capaz de disculpar toda deficiencia. La luz del sol y la fuerza de la primavera han despertado el amor en sus corazones, primero en la más sensible y soñadora de las protagonistas.


De agradable lectura, la autora domina el arte de describir con gracia el mundo interior de los personajes, haciendo sonreír con frecuencia al lector. Quizá la principal lección del relato es ayudarnos a caer en la cuenta de la potencia transformadora sobre los demás de nuestra mirada de cariño. Nada ayuda tanto a desear ser buena persona como sentir sobre uno una mirada de cariño y aliento. 


Como el sol y la belleza del paisaje son capaces de disipar las tinieblas interiores, una mirada sincera de cariño es capaz de disipar todo prejuicio y hostilidad en las relaciones. Nunca acabaremos de descubrir suficientemente la poderosa capacidad transformadora del amor


       

 

 

 

 

jueves, 23 de junio de 2022

El arte de ser amables

    Esta escena de la comedia romántica "Mejor imposible" (As good as it gets, 1997), protagonizada por Helen Hunt y Jack Nicholson, refleja con gracia el valor de una virtud que deberíamos poner en valor: la amabilidad. 

   Muchos de nuestros políticos y "comunicadores" desprecian la amabilidad. Con frecuencia en sus "diálogos" prefieren hacer alarde de descortesía, quizá porque piensan que con su insana estridencia se hacen notar más. Pero lo único que consiguen es envenenar la convivencia. 

    Las personas no estamos hechas para la agresión -ni siquiera verbal- ni para el desafecto, sino para la empatía y la amabilidad. Olvidarlo es abrir las puertas al infierno, que debe ser un estado de horrible incomprensión entre seres reconcentrados en su egoísmo. 

    Mirar a los ojos, sonreír, escuchar con paciencia, tratar de hacerse cargo de lo que siente, piensa y prefiere el otro, pronunciar con frecuencia su nombre durante la conversación... Son pequeños detalles con los que afirmamos al otro en su dignidad, y al hacerlo nos hacemos más dignos a nosotros mismos, porque damos con la llave natural de la propia felicidad: el amor al otro. 

    "Tú haces que quiera ser mejor persona." ¿Hay frase más amable que esta? ¿Por qué no intentamos que quienes se cruzan en nuestro camino la sientan? ¿Por qué no la expresamos con más frecuencia y agradecimiento a nuestros seres queridos? 


miércoles, 22 de junio de 2022

Diferentes y complementarios

    Cuando la relación entre un hombre y una mujer es incondicional, la pareja no es una cosa más en la vida de cada uno de ellos. Es un valor transversal, que está presente en todos los aspectos de la vida. El otro pasa a ser el soporte de la natural dependencia de cada uno. La pareja se siente un equipo en todo momento, y uno procura actuar de manera que en el otro surja el deseo de ser mejor persona.

    La psicóloga Lucía Pérez explica en esta práctica sesión cómo mejorar el entendimiento y la unión de afectos entre el hombre y la mujer. Requiere el esfuerzo de comprender las diferencias entre uno y otro, y descubrir la fantástica riqueza que surge en el día a día de las parejas que han entendido su complementariedad, se quieren como son, incluso con sus defectos, y al validar, admirar y aceptar al otro le ponen en condiciones de sacar lo mejor de sí mismo. 

    Como las anteriores, esta sesión puede ayudar también  a jóvenes que estén pensando en elegir pareja, y desean acertar.


Uno con una y para siempre: una locura y un fantástico regalo

    Esta sesión del simpático dentista catalán Pep Borrell, dirigida a novios y jóvenes padres de familia del colegio Guadalaviar de Valencia, sobresale por una espontaneidad llena de sentido común. Forma parte del mismo ciclo reseñado en entradas anteriores. Aporta muchas claves prácticas para descubrir en el día a día de cualquier pareja la gran belleza del matrimonio y la felicidad que se puede llegar a alcanzar cuando se tienen en cuenta detalles sólo en apariencia insignificantes.

    Muchos jóvenes naufragan en el proceloso mar de los sentimientos y afectos porque no aciertan a modularlos con la inteligencia y la voluntad. No es lo mismo atracción que enamoramiento. Y pasar del enamoramiento al amor auténtico requiere un compromiso en el que interviene la voluntad: comprometerse a amar: en la salud y en la enfermedad. Uno con una y para siempre: es de locos, pero cuando ambos conciertan sus voluntades en mantener el compromiso para siempre, suceden maravillas...

 

     

lunes, 20 de junio de 2022

Temperamentos diferentes, dones complementarios

    El profesor Iokin de Irala explica magistralmente en esta nueva sesión las características de los diferentes temperamentos (sanguíneo, flemático, colérico y melancólico). Son inamovibles, un dato que con frecuencia se olvida, con resultados peligrosos en la educación de los hijos o en el entendimiento entre los cónyuges. 

    Por eso un ejercicio necesario es conocer bien las características peculiares del temperamento del hijo o de la pareja. Y en general también de cualquier persona con la que vayamos a tener un trato frecuente. Así no generaremos expectativas inadecuadas. Dicho en positivo, pondremos a persona en condiciones de dar lo mejor de sí y aumentar su autoestima. 

    El profesor Irala recomienda esta página que contiene un autotest para conocer el propio temperamento, y en consecuencia sus fortalezas y debilidades. Añade consejos muy prácticos.

    Aparte, claro, está el carácter, que ese sí es mejorable. También da buenas pistas sobre cómo perfeccionarlo. Incide con ejemplos de la vida diaria y de la experiencia familiar en los diferentes modos de ser y reaccionar del varón y la mujer.  

            

Abraza su alma con tu cuerpo

    Esta sesión del catedrático de medicina Iokin de Irala complementa perfectamente la anterior de Rafael Lafuente. La nobleza y dignidad del ser humano radica en su ser no sólo carne, sino también espíritu. Alma y cuerpo en perfecta unidad, indisociables, permiten a la persona alcanzar las cotas más altas de la felicidad cuando se dan juntas al ser amado. Por eso es posible abrazar el alma del amado cuando se le abraza con un cuerpo realmente enamorado. 

           

Amor al 100 %

    El amor verdadero entre un hombre y una mujer es una realidad infinitamente más bella, valiosa y profunda de lo que nos suelen presentar los productos audiovisuales. 

    Esta sesión del profesor Rafael Lafuente, dirigida a padres del colegio Guadalaviar de Valencia, me ha impresionado por la simpatía y claridad con que se refiere a esos estrechos lazos de afecto, comprensión, sentimiento, sexualidad, cooperación y perdón que garantizan el amor gozoso y perdurable "para siempre", condición sustancial del amor genuino. 

    Vale la pena escucharlo con calma. Muchas parejas se entenderán mejor a sí mismas, y aprenderán a saltar por encima de tantos obstáculos que hoy parecen confabularse para hacer fracasar las uniones conyugales. Los erráticos productos audiovisuales parecen haber tenido un efecto social demoledor, al actuar como modelos de conductas bastante alejadas del verdadero sentido del amor.

    Aporta también pistas para quienes todavía están en el trance de escoger pareja, y desean que la persona elegida comparta su deseo de alcanzar la felicidad mediante un amor leal y duradero, que navegue con soltura por los mares agitados de la vida.